Así era el origen y significado de los nombres prehispánicos

Este viaje por el tiempo te llevará por caminos que te van a sorprender.

Nuestro nombre es parte esencial de nuestra vida; con él nos identificamos, e incluso hay quienes piensan que moldea la propia personalidad. A lo largo de la historia la designación de nombres ha tenido diferentes caminos y significados, importantes dentro de un contexto social específico, y la época prehispánica no fue la excepción. Hoy revisaremos el origen de los nombres prehispánicos, a través de un viaje por la historia que te va a sorprender.

 

La peculiaridad y el origen de los nombres prehispánicos

Quizá en alguna visita a las zonas arqueológicas de México te has topado con nombres de antiguos reyes y señores. Lo primero que salta a la vista es su peculiaridad, ya que se encuentran formados por un número y un sustantivo, como es el caso, en la historia de Oaxaca, de los señores de Suchilquitongo y Atzompa, que recibieron el nombre de “12 Mono” y “8 Temblor” respectivamente. Tal vez estos casos te sean motivo de intriga y te estés preguntando ¿Por qué se llamaban así?, o ¿Qué querían decir esos nombres? Esto es lo que hoy vamos a responder.

Señor 8 Temblor, de Atzompa / Foto Oaxaca Mío

Hoy en día, y gracias a los cronistas del s. XVI, sabemos que los nombres prehispánicos se componían de tres partes: una calendárica, otra familiar y un sobrenombre. Cada una de las partes eran esenciales para las personas; pero existía una, la calendárica, que era sagrada y no se podía pronunciar por cualquiera.

 

Nombre calendárico

El nombre calendárico constituía una especie de tabú y solo se encontraba escrito en los códices y en las tumbas de los personajes importantes. Esto se debía a que, al ser resultado de una combinación de números y signos, un nombre traía en sí mismo “cargas” positivas, negativas o neutras; y podía marcar el destino de quien lo tuviera. Algunos de ejemplos de esto son 5 Perro, 1 Caña y 5 Lagarto, que es como actualmente se les denomina debido a que sus estudios se realizan a través de vestigios históricos.

 

Sobrenombre o nombre público

Este segundo nombre era impuesto por un sacerdote dentro de una ceremonia especial, cuando los niños tenían entre 6 y 13 años de edad. El rito constituía en una especie de bautismo (diferente al católico) en el que se ponía al niño el “alias” con el que todos lo conocerían. Este tipo de nombres y sus significados son más conocidos dentro de los libros de historia; algunos de ellos son Moctezuma (“el que se muestra enojado”), Cuauhtémoc (“águila que desciende”) y Tízoc (“el que hace sacrificio”), que encierran significados con los que sus portadores se identificaban.

Tabulador del calendario de 260 días

Nombre familiar

Este último tipo de nombres era parecido a lo que hoy conocemos como “apellido”. Era la parte que identificaba al niño como miembro de una descendencia. Uno de los casos más conocidos de nombre completo prehispánico es el del señor de Texcoco: 1 Venado (nombre calendárico) Coyote que Ayuna (sobrenombre) Hombro de Puma (nombre familiar); en náhuatl se pronunciaba Ce Mázatl Nezahualcóyotl Acolmiztli, y la historia lo recuerda como Nezahualcóyotl, el rey poeta.

Si bien el origen de los nombres prehispánicos es mucho más complejo, esta es una breve introducción, para mostrar lo fascinante que puede ser la historia de nuestros antepasados. Nos vemos en el próximo viaje por el tiempo.

 

Ahora que ya conoces el origen de los nombres prehispánicos, échale un vistazo a: ¿Quiénes fueron los antiguos habitantes de Oaxaca?

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.