A continuación te presentaremos cada destilado mexicano de agave, y sus características y sabores únicos.
México, cuna de sabores y tradiciones, nos sorprende con una amplia gama de destilados de agave, auténticas joyas que conquistan la cultura y el paladar mexicano. Bacanora, tequila y mezcal son solo algunos de los tesoros que nos ofrece el alma del maguey. A continuación te presentaremos cada destilado de agave y sus características únicas ¡Prepárate para ampliar tu horizonte de bebidas tradicionales mexicanas!
¿Todos los destilados de agave son mezcales?
Todos los destilados de agave se conocen como «mezcales», pero cada uno tiene su propio nombre, diferenciándose por la materia prima, el proceso de producción y su ubicación geográfica. Pero, seguro te estarás preguntando ¿Por qué no todos llevan el nombre de «mezcal«? La razón es porque las legislaciones de Denominación de Origen Mezcal (DOM) establecen los nombres para cada destilado, según el lugar, identidad cultural y métodos de producción. Solo pueden llamarse mezcales las bebidas hechas en los 9 estados de la República que establece la DOM.
Destilado mexicano de agave, un abanico de opciones
Cada destilado de agave es un viaje único que te transporta directo a la región que lo vio nacer. De acuerdo con la forma de producirlos. Conócelos todos:
- El tequila es el destilado más conocido de México. Puede producirse en Jalisco (tierra que lo vio nacer), Guanajuato, Nayarit, Michoacán y Tamaulipas. Es conocido por su sabor dulce y se destaca por utilizar únicamente el agave tequilana.
- El comiteco es originario de Comitán de Domínguez, Chiapas. Este destilado utiliza el maguey azul y es adicionado con panela y se distingue por su proceso de fermentación del aguamiel. Su sabor dulce, floral y herbal lo convierte en una experiencia única para el paladar.
- La raicilla es producida en Jalisco y Nayarit. Este destilado tiene un carácter fuerte debido a su alta graduación alcohólica. Al igual que el mezcal se puede hacer de diversas variedades de maguey, pero lo que lo vuelve diferente es su destilación en madera de incienso, otorgándole un sabor herbal y amaderado.
- La tuxca proviene de las tierras cálidas de Jalisco y del norte de Colima. Este destilado refleja la zona volcánica en la que se produce. Su temperatura tibia y sus sabores minerales son el resultado de 10 agaves diferentes y la leña utilizada en la cocción.
- El bacanora procede exclusivamente de Sonora. Destaca por el uso de agave pacífica y por su alta graduación alcohólica, preservando los sabores minerales de la tierra donde creció la planta.
- Debemos una mención especial al Sotol, porque, aunque no proviene estrictamente de un agave, por su proceso y características se puede colocar dentro de esta categoría. Realizado en Durango, Chihuahua y Coahuila, esta bebida destaca por su sabor ahumado, a tierra y leña, y se caracteriza por su alta graduación alcohólica.
La riqueza cultural de cada destilado de agave reside en las comunidades que han cuidado sus tradiciones con devoción. Compartir su identidad cultural es esencial para mantener viva la autenticidad de cada gota. Estas bebidas han cruzado fronteras gracias a su tradición y calidad ¿Te animarías a probarlas todas?
Ahora que ya conoces cada destilado de agave, échale un ojo a: ¿Cuáles son las diferencias entre tequila y mezcal?