El filme habla sobre las muxes, el plagio a los textiles tradicionales y pone en la mira una vez más a Oaxaca
Cuando se trata de estrenar una película, las alfombras rojas suelen llevarse a cabo en las grandes ciudades, pero Finlandia, película sobre muxes realizada por españoles y mexicanos, y dirigida por Horacio Alcalá, tuvo su estreno en el municipio de Nejapa de Madero, Oaxaca, en la Sierra Sur el 17 de septiembre.
A este gran evento acudieron artistas locales y nacionales, actores y actrices del reparto, y representantes de la comunidad muxe del Istmo de Tehuantepec, como el colectivo «Las intrépidas Buscadoras del Peligro». El estreno se llevó a cabo en comunidad y en espacio abierto, bajo el techado municipal de Nejapa de Madero.
Posteriormente, se brindó una cena en el Instituto Intercultural Calmécac, organizada por la chef Alicia Zárate. Además, las personas que se quedaron a pasar la noche fueron hospedadas en domicilios particulares, así que realmente se mostró la colectividad del municipio.
Si te interesa el arte y la temática sobre el género, lee: Por qué este “Zapata” no es ni feminizado ni la única obra en su tipo.
La película trata sobre Marta, interpretada por Andrea Guasch, una diseñadora española que viaja a Oaxaca para inspirarse con la vestimenta tradicional de los pueblos indígenas, pero que termina descubriendo mucho más que inspiración durante su estadía y se le revelan pasiones y sentimientos escondidos, acompañada de las muxes.
Finlandia fue filmada en Oaxaca entre 2019 y 2020, y fue un trabajo conjunto con artistas locales como la actriz Ángeles Cruz, el compositor Nathanael Lorenzo Hernández, los promotores culturales Patricia López y Mario Come Oaxaca, y el titular de la Comisión Fílmica de Huatulco, Oscar Sánchez.
En entrevista con Sucedió en Oaxaca, el director Horacio Alcalá, mexicano nacido en Guadalajara, pero que reside en Madrid, contó que la película sí toca el tema LGTB, pero se trata más bien de un tópico ancestral, antropológico, histórico e incluso de cultura, más que de género. La película, además, pone de relieve el tema del plagio de la ropa tradicional por las multinacionales de moda y de acuerdo con los creadores, “toca fibras del sentir colectivo […] y nos invita a repensar sobre temas que siguen siendo tabú”.
