Utilizado para destilar alcoholes, el alambique es un artefacto que fue conocido en gran parte del mundo gracias a los árabes.
Diego Carlo Améndolla Spínola
Desde hace varios siglos el consumo de bebidas alcohólicas es una costumbre entre las diversas sociedades. No obstante, la elaboración de los licores no ha sido fácil, pues ha implicado que se utilice diversos artefactos que faciliten y diversifiquen su producción; entre ellos sobresale el que hoy nos interesa: el alambique.
¿Qué es un alambique?
El alambique es un instrumento con forma de pera, utilizado para destilar o separar dos líquidos mediante la ebullición. Estos artefactos han servido a lo largo de la historia para producir diversos alcoholes, perfumes, etc.
Origen del alambique
La primera ocasión en la que tenemos noticia del uso del alambique es en el siglo I d.C. En esa época, los alquimistas griegos utilizaban el alambique para destilar diversos productos. No obstante, el uso de dicho instrumento se daba a una escala muy pequeña por lo que habría que esperar hasta el siglo VII d.C. para que este fuese mayormente utilizado y perfeccionado por los árabes.
Diversificación en los usos del alambique
A partir del año 700, los árabes no sólo ocuparon más constantemente el alambique sino buscaron formas de diversificar su uso. Por ejemplo, inventaron hornos cilíndricos que contaban con una importante cantidad de alambiques; de esta manera producían agua de rosas. A la par, comenzaron a utilizar el alambique para destilar alcoholes y producir perfumes. Estos últimos provenían de la mezcla de alcohol, agua y flores, lo cuales se destilaban para la creación de líquidos aromáticos.
El alambique en Occidente
Como consecuencia de las incursiones musulmanas a Europa, este instrumento llegó a manos de las personas de dicho continente. Así fue cómo utilizaron principalmente este artefacto para destilar bebidas con alcohol; entre toda ellas, destaca el aguardiente, el brandy y la ginebra. Del mismo modo, usaban este nuevo instrumento para preparar destilaciones de alcohol y hierbas de uso medicinal.
Las bebidas alcohólicas solían destilarse en dos ocasiones: la primera de ellas producía un aguardiente con una concentración del 60%, mientras que la segunda alcanzaba hasta el 90% de concentración.
El origen del alambique en el Nuevo Mundo
En tiempos anteriores a la Conquista ya se consumían diversas bebidas alcohólicas como el pulque y el mexcalli. La producción de estos líquidos se obtenía mediante la fermentación del maguey. Con la llegada de los españoles, se comenzó a utilizar el alambique para destilar el agave. El grato resultado de ese procedimiento fue nuestro mezcal: una bebida que fue gratamente recibida tanto por los indios como por los españoles, y que es ampliamente consumida hasta nuestros días.
¡Vaya invento! Como pudiste observar, el alambique es un instrumento sorprendente cuyo origen puede ser rastreado hacia el siglo I d. C. y que de mano de los árabes pudo llegar al occidente europeo para, posteriormente, alcanzar las tierras de la Nueva España.
Ahora que sabes más sobre el origen del alambique y los productos que se pueden producir con este artefacto, te invitamos a leer: Producción de aguardiente en Nueva España
