Las muerteadas se preparan con meses de anticipación para ofrecer a la comunidad y a los visitantes una experiencia inolvidable
Se acerca el 2 de noviembre y en Oaxaca solo puede significar una cosa ¡Han llegado las Muerteadas! Una comparsa popular que no puede faltar en esta temporada tan especial. En Quixe somos amantes de la tradición y el buen ambiente, por lo que te recomendamos ampliamente que experimentes esta celebración oaxaqueña. A continuación, te explicamos todo lo que debes saber sobre estas mágicas veladas.
Las Muerteadas, celebrando la vida en Oaxaca
Para los mexicanos el Día de Muertos es la fecha en la cual los difuntos nos visitan en el plano terrenal. Además de llorar por su ausencia, celebramos el reencuentro con nuestros seres queridos y, de paso, aprovechamos para mofarnos de la muerte. Pues, si la huesuda nos llevará a todos en algún momento, ¿por qué no tomárselo con gracia mientras estamos vivos?
Las muerteadas nacieron hace unos 80 años en medio de esta actitud de burla a la muerte. Son recreaciones teatrales que, entre versos y chistes, narran la historia de cómo una persona fallecida es resucitada con la ayuda de un cura, un doctor y un espiritista; una vez que se realiza la dramática y chusca escena, comienza la algarabía y se da inicio a la comparsa. Dentro de los disfraces, aparte de los personajes principales, siempre se pueden encontrar personas que van vestidas con cascabeles para ahuyentar a las brujas.
Estas tradicionales fiestas no son nada parecidas a las comparsas que se celebran durante todo el año en el estado de Oaxaca. Las muerteadas se preparan con meses de anticipación para ofrecer a la comunidad y a los visitantes una experiencia inolvidable en todos los aspectos. Se elaboran los vestuarios, se eligen a los participantes y se contratan músicos para amenizar hasta el amanecer. Lo que las ha vuelto sumamente especiales es que todos los anfitriones abren las puertas de sus hogares y ofrecen alimentos y delicioso mezcal a todo el público.
Disfruta de una noche inolvidable con las Muerteadas
Las muerteadas originales se realizan el 1 de noviembre y terminan la madrugada del 2. Las más grandes y famosas se viven en el Valle Eteco: Villa de Etla, San Agustín Etla y San Pablo Etla. Sin embargo, actualmente se celebran muerteadas en diferentes puntos del estado oaxaqueño.
Si deseas vivir una noche llena de tradición, alegría y mucho mezcal, las Muerteadas son la mejor opción para ti. No olvides llevar tu disfraz y prepárate para caminar y bailar al compás de la música en esta celebración anual. No te pierdas de esta oportunidad única para unir a las personas y rendir homenaje a la memoria de aquellos que han partido.
Si ya te picaste con esta gran fiesta de Oaxaca, date una vuelta por: Festival de Murales de Zaachila ¡Vive el arte con toda la familia!
