En Oaxaca existen lugares de arte rupestre. Te contamos de cinco,
El estado de Oaxaca, en México, es un verdadero tesoro arqueológico y cultural. Sus paisajes montañosos, valles fértiles y tradiciones arraigadas se entrelazan para descubrir el arte de las más antiguas civilizaciones. Estas pinturas y grabados en roca nos transportan a un pasado remoto, revelando las creencias, actividades y modos de vida de los primeros habitantes de la región. Comencemos a descubrir el arte rupestre en Oaxaca.
Conociendo el pasado: Lugares para admirar arte rupestre en Oaxaca
Explorar estos cinco lugares para ver las manifestaciones rupestres del arte en Oaxaca es como viajar en el tiempo. Las imágenes grabadas en piedra nos cuentan historias de antiguas civilizaciones y nos ayudan a comprender mejor las culturas que dieron forma a esta región tan rica en historia. Aquí presentamos cinco fascinantes lugares, localizados en los pueblos de Oaxaca, donde se puede contemplar y apreciar el enigmático arte rupestre.
1. Yagul, las pinturas en las cavernas del “pueblo viejo”
La zona arqueológica de Yagul, cerca del Valle de Tlacolula, es famosa por sus estructuras arquitectónicas únicas y por su arte rupestre bien conservado. Entre los petroglifos tallados en la roca se pueden apreciar representaciones de símbolos religiosos, figuras humanas y elementos geométricos. Estas inscripciones grabadas en piedra ofrecen una visión valiosa de la cosmovisión de los antiguos habitantes del “pueblo viejo”.
El complejo se integra de 120 sitios con 12 mil años de antigüedad. Dentro de él podrás encontrar cuevas, abrigos rocosos y piedras con motivos pictóricos. En estas cuevas observarás pinturas de figuras humanas, animales, flechas y otras formas abstractas referentes al cielo y al cosmos.
2. Mitla, el Patrimonio de la Humanidad del arte rupestres en Oaxaca
Conocida principalmente por su arquitectura excepcional y sus intrincados diseños en mosaico, la zona arqueológica de Mitla también alberga arte rupestre en sus alrededores. En las cuevas cercanas, y en las laderas de las montañas, se pueden encontrar petroglifos que representan figuras humanas estilizadas y símbolos sagrados. Este lugar ofrece una visión única de la cultura zapoteca y su relación con la naturaleza.
Estas cuevas, junto a las de Yagul, fueron declaradas Patrimonio Mundial de la Humanidad, en la categoría de “Paisaje cultural”, por la UNESCO. Además de los cientos de pinturas que nos relatan la vida de los primeros pobladores de México, se encontraron algunos de los restos más antiguos que nos relatan la domesticación de las plantas. Un ejemplo de esto es la cueva Guilá Naquitz donde se encontraron semillas de calabaza con más de 10,000 años de antigüedad.
3. Santiago Apoala, la Cueva del Diablo y las Peñas Gemelas
Enclavado en las profundidades de la sierra oaxaqueña, el pintoresco pueblo de Santiago Apoala alberga un verdadero tesoro del pasado: el arte rupestre. A medida que nos aventuramos en este rincón remoto de Oaxaca, nos adentramos en un mundo de misterio y maravilla. Aquí las rocas grabadas nos cuentan historias de las antiguas civilizaciones que habitaron estas tierras desde 2,200 años a.C.
En lugares como la Cueva del Diablo o las Peñas Gemelas podrás ver representaciones en las rocas que abarcan una amplia gama de temas; desde figuras humanas y cultivos hasta símbolos geométricos y abstractos. Muchas de estas imágenes parecen estar relacionadas con la caza, la recolección y la interacción con la naturaleza. Además, Santiago Apoala tiene un sinfín de actividades que puedes hacer, chécate este articulo para que puedas planear con tiempo un fin de semana lleno de cultura y diversión.
4. Ixpantepec Nieves, un sitio asombroso para encontrar arte rupestre en Oaxaca
Ubicado en el Barrio de Guadalupe, municipio oaxaqueño de Ixpantepec Nieves, se encuentra la Peña del Colibrí. Este sitio es mejor conocido como Kava Ndiyo’o, en lengua mixteca. Este lugar cuenta con pinturas rupestres que se encuentran a lo largo de 11 complejos distribuidos en un frente rocoso de 350 m de longitud y más de 20 metros de altura.
Una de las figuras que más se repite es la de las manos, las cuales están relacionadas con motivos rituales. Este sitio era considerado sagrado, ya que aquí se hacían las peticiones para épocas de lluvia o para tener buena cosecha. También podrás observar pinturas de humanos, animales o abstractas con motivos geométricos. Entre los colores encontrarás distintos tonos de rojo, anaranjado, ocre, amarillo, negro y blanco, todos obtenidos a través de la molienda de minerales de la zona.
5. San Pablo Macuiltianguis, arte rupestre en la Sierra Juárez
Enclavado en el corazón de las montañas y las nubes, San Pablo Macuiltianguis es un rincón mágico en la Sierra Juárez de Oaxaca, donde la naturaleza y la comunidad se entrelazan en perfecta armonía. Lo que hace que este lugar sea verdaderamente especial es la profunda conexión que sus habitantes tienen con la naturaleza y su firme compromiso con su preservación.
Los turistas que llegan a este paraíso montañoso pueden disfrutar de una variedad de actividades, desde deportes hasta exploraciones guiadas. A través de recorridos los guías locales comparten su conocimiento sobre las plantas endémicas y las enigmáticas pinturas rupestres que cuentan antiguas historias. Las caminatas hasta el pueblo brindan la oportunidad de sumergirse en la cultura local, aprender algo de zapoteco y explorar las calles y el mercado de la comunidad.
Explorar estos lugares para ver arte rupestre en Oaxaca es sumergirse en un viaje en el tiempo, conectando con las civilizaciones que moldearon la historia de la región. Estas expresiones artísticas nos hablan de la espiritualidad, la cotidianidad y la creatividad de quienes las crearon, permitiéndonos apreciar la rica herencia cultural que perdura en las rocas y montañas de Oaxaca.