¿Has escuchado hablar de las suculentas en México? En esta ocasión no hablamos de las quesadillas, las gorditas, ni de cualquier otro tipo de antojito mexicano, sino de un grupo de plantas.
Parecería extraño bautizar a cierto tipo de flora con este adjetivo. Pero, si quieres saber todo sobre esta peculiar categoría, sigue leyendo hasta el final. Además, prometemos deleitarte con dos hermosos paisajes mexicanos que son protagonizados por estas particulares plantas. 
¿Qué son las suculentas en México?
Esta es una clasificación que se le ha dado a la flora de diferentes familias y que coinciden en una característica principal: alojan grandes cantidades de agua en alguna parte de su cuerpo; puede ser en las hojas, el tallo, las raíces, o en todas a la vez.
Gracias a esta cualidad son muy resistentes a condiciones climáticas extremas; es decir, tanto a las altas como a las bajas temperaturas, por ello es común encontrarlas en territorios áridos o desérticos.
Pero no sólo las hallamos en estos hábitats, sino también en las ciudades. Casi podríamos afirmar que todos hemos visto una suculenta, incluso de cerca, porque la planta que estaba en casa de tu abuelita, la que tenía una superficie parecida al foami y que por más que pasaran los años nunca se secaba, esa, era una suculenta.
Menos plática, más acción
Ahora ya sabemos a qué nos referimos cuando hablamos de esta categoría, pero es hora de que pasemos a la práctica y cumplamos nuestra palabra de llevarte a dos hermosos lugares, donde nos encontraremos con bellísimas postales en las que estas plantas son las protagonistas.
Estos paisajes residen en dos estados que parecería que nada tienen en común, ya que están en ambos extremos del país, uno en el norte y otro en el sur. Se trata de Baja California Sur (BCS), donde se encuentra el Santuario de los Cactus, y de nuestra casa, Oaxaca, donde los Cultivos del Agave son una belleza de todos los días.
Ya verás cómo las características de su flora unen a estos estados, más de lo que nos podríamos imaginar.
Santuario de los Cactus, entre las suculentas en México
El hermoso lugar se encuentra al sur de BCS, en el poblado de El Rosario, que pertenece al municipio de La Paz, capital del estado, donde podemos encontrar miles de plantas de la familia cactaceae. Es decir que no sólo hay cactus alargados, tal y como los conocemos, sino también biznagas, nopales y mezquites. Todos han crecido de manera natural, o sea, ningún humano los sembró o modificó para lograr esta maravilla.
Aquí podemos admirar la función principal de las suculentas en todo su esplendor: almacenar agua entre una lluvia y otra -que puede tardar hasta nueve meses en llegar. ¡Imagínate cuánta agua deben guardar en su interior para poder sobrevivir!
Cultivos de Agave
Muchas regiones de Oaxaca son famosas por la producción de mezcal. Pero sólo una se conoce como su capital mundial: el pueblo de Santiago Matatlán. Ahí se encuentra otra de las postales conformada por las famosas suculentas, nos referimos a los hermosos cultivos de Agaves Mezcaleros.
En este lugar podemos encontrar extensos sembradíos de la planta que produce esta bebida de los dioses. La alineación de los agaves nos ofrece una experiencia inigualable, y podemos ver desde los más pequeños, hasta los que se encuentran listos para producir el mezcal.
Todos los tipos de agave de los que les hemos estado hablando pertenecen a este grupo. Aunque estos sembradíos están controlados por la mano del hombre, específicamente por los maestros mezcaleros, a lo largo de los Valles Centrales de Oaxaca podemos encontrarlos en su forma silvestre y, al igual que a las cactáceas de BCS, deben almacenar el agua y administrarla hasta la próxima lluvia.
Suculentas postales
Esos son tan sólo dos ejemplos de postales que representan toda la riqueza de México. Hoy ha sido a través de esta particular categoría, pero no nos equivocamos cuando decimos que nuestro país se encuentra lleno de maravillosos escenarios. Te invitamos a conocerlos, disfrutarlos, y dejarte sorprender por ellos; en dos palabras, ¡a vivirlos! Y quién sabe, quizá tu camino se convierta en una deliciosa experiencia; y si por el mismo te encuentras una de estas asombrosas plantas, podrás decir que se ha convertido en una “suculenta” travesía.
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