El récord fue posible gracias a productoras y productores que trabajaron durante horas.
¿A quién no le gusta el quesillo? Este delicioso platillo es manjar para chicos y grandes. Y tanta es su popularidad que el portal de comida internacional Taste Atlas lo ha colocado en la lista de los mejores quesos del mundo. Convencidos de su valor gastronómico y cultural productores de Reyes Etla, en Oaxaca, decidieron romper el récord Guinness al elaborar el quesillo más grande del mundo. Esto es lo que sucedió.
Oaxaca rompe el récord Guinness con todo el sabor del quesillo
Desde la madrugada de este viernes 19 de julio productoras y productores de Reyes Etla, Oaxaca, se dieron cita en la explanada municipal para elaborar el quesillo más grande del mundo; y con él quedar asentados en el libro de los récords Guinness. El objetivo era elaborar una bola de quesillo que pesara alrededor de una tonelada, y con ella superar al antiguo récord de 558 kg, conseguido en 2023 en Pijijiapan, Chiapas. Anterior a ello, el título lo poseía el estado de Campeche con un pieza de 400 kg.
Fue alrededor las 4:30 pm cuando se batió oficialmente la marca anterior, pero la tensión creció al anunciar que los participantes contaban con poco más de una hora para lograr su cometido. A las 6 pm la enorme bola de quesillo fue inscrita oficialmente en el libro de récords Guinness con un peso de 636.2 kg, es decir, 78 kg más que la cifra anterior. Con este suceso, Reyes Etla, la cuna del quesillo, se coronó como la ganadora indiscutible del récord mundial.
Una deliciosa tradición que nació en Reyes Etla
Popularmente se conoce a Reyes Etla como la cuna del quesillo, ya que cuenta la leyenda que durante el siglo XIX vivió ahí una joven llamada Leobarda Castellanos García, quien pertenecía a una familia de queseros. Cierto día se encargó a Leobarda supervisar la cuajada de la leche, pero debido a su distracción se le pasó el tiempo preciso, al punto de deshidratarse. En un afán de componer su error, la joven agregó leche caliente a la mezcla, y en ese momento se formó una pasta chiclosa que hacía hebra al momento de estirarse. Gracias a ese afortunado accidente surgió el manjar que ahora conocemos como quesillo.
Pero regresemos al día de hoy, porque para celebrar la tradición y obtención del récord Guinness, una vez terminada la enorme bola de quesillo, los productores participantes comenzarlo a cortarlo para repartirlo entre los espectadores. Para disfrutar del manjar también se repartieron otros ingredientes típicos de la gastronomía oaxaqueña, como las tlayudas y los chapulines. La obtención del récord Guinness se convirtió en una verdadera fiesta, y pone a Oaxaca y a su delicioso quesillo en el ojo de México y el mundo.
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